Aspecto:
Tengo aspecto de mujer humana. Alta, delgada, rubia y con ojos grises. Generalmente visto de blanco o verde. Me gusta permanecer al aire libre, especialmente en los bosques de Ithilien.
Historia:
Servidora de Oromë y Vana, viví toda mi vida en Valinor, desde mi descenso a Arda. Allí he tenido una vida feliz aunque algo solitaria, ya que no tenía mas amigos que un Maia que descendió junto a mi cuando fue creado el mundo. Jamas se ha separado de mi, es un fiel compañero, que me comprende y me escucha. Su nombre es Súrë, pero lo llamamos Steve.
Al cabo de algunos años, debido a que Manwë se sentía inquieto, me enviaron a la Tierra Media, antes del comienzo de la Tercera Edad, acompañada por Aglaren, mi blanco corcel descendiente de Nahar, y un pequeño halcón que me regalo Steve; con la misión de aconsejar a los Hombres, por lo que me vi obligada a despedirme de mi compañero.
He viajado muchas leguas y conocido muchos lugares, incluyendo El Poney Pisador, donde me recibieron muy amablemente. Ahora me encuentro en los bosques Ithilien, viviendo cerca de la morada del príncipe Faramir, pues me enamore de uno de sus montaraces.
Habilidades:
Amiga de todas las criaturas vivientes, me ayudan en momentos de necesidad. Puedo dominar muy bien a los caballos y las águilas son mis espías. No me gusta luchar, pero si me encuentro en grave peligro y rodeada de orcos puedo ser muy peligrosa. Puedo persibir la maldad. Soy muy buena en las artes de curación.
Armas:
Arco y espada. Mi espada fue un presente de Aulë el Vala, que me la entrego como ayuda para el cumplimiento de mi misión.
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