En la Tierra Media habitaban variadas criaturas oscuras, bien espíritus maiar pervertidos por Morgoth, que adoptaron formas horrendas en oposición a los Hermosos, los Eldar, o bien animales y plantas capturados y torturados y degenerados hasta convertirlos en formas grotescas. Los primeros fueron llamados Úvanimor, los no-hermosos, y los segundos Úvanor, monstruos. A unos y otros, los podemos englobar en esta clasificación, demonios, pues no eran otra cosa que terribles criaturas malignas. Entre ellas, podemos destacar las siguientes: