Aspecto:
Soy en aspecto, similar a la mayoría de los de mi raza, es decir ;cabello y ojos oscuros, así como una considerable altura(1.97m, en medidas comunes). Soy bastante delgado, y suelo vestir una cota de malla de fino acero, hecha por herreros del Norburgo, por debajo de mis vestimentas de colores oscuros(casi siempre)aunque si me ven en Annúminas seguramente iré vestido de blanco.
Historia:
Nací en el año 2990 de la Tercera Edad, con mis padres vivímos durante varios años en distintos puntos en las cercanías de las Quebradas del Norte. Cumplidos 8 años desde mi nacimiento, la región era cada vez más peligrosa, así que fuimos moviéndonos al oeste, hacia la Laguna del Crepúsculo. No paso mucho tiempo hasta darnos cuenta de que aquí las cosas no eran mucho mejores.
Mi padre Alivel estaba, generalmente(y ahora aún más)en el descampado, siguiendo las órdenes del gran capitán. Ultimamente había estado mucho tiempo al oeste de las Emyn Nenuial, en las riberas del Lhun, allí había tenido trato con algunos Eldar de Mithlond. Yo había visto a pocos del Pueblo de las Estrellas, y me maravillaba que mi padre tuviera amigos entre ellos. Al tiempo, mi padre dejó de ir hacia el oeste, comenzaban a haber muchos problemas en los demás puntos del reino custodiado.
Unos meses después mi padre murió en una incursión de Huargos en Minhiriath.
Vivir en las orillas del Evendim era cada día más riesgoso debido a las criaturas y a los bandidos que pululaban por la región, y mas aún sin mi padre allí. Así que mi madre, por el aprecio que le tenían algunos a mi padre, logró que los Eldar nos recibieran un tiempo. Entonces nos fuimos más aún hacia el oeste, por sobre las emyn Nenuial, a las orillas occidentales del Lhun, a poca distancia de los Puertos Grises. A los 2 años de que muriera mi padre, finalmente la fatiga y las preocupaciones, sumadas al dolor que cargara desde que muriera mi padre, vencieron a mi madre y ella falleció. Como yo era aún muy joven, los Eldar me mantuvieron con ellos por años, al cuidado de uno llamado Finlaurë, un Noldo de la Casa de Finarfin, que me enseñó con bondad muchos conocimientos que había adquirido en las largas edades que había sufrido y disfrutado desde sus primeros años en Amán, historias y tradiciones tanto de la Hermosa Gente como de los Dúnedain, así como el manejo de la espada y el uso del arco y flechas, en el que pocos lo superan en la Tierra Media, aún entre los Eldar.
En fin, en el 3014(de la Tercera Edad claro está), considerándome ya lo suficientemente preparado,aunque muchos de los amigos que hice entre los Eldar de Mithlond me instaban a que esperara aún un tiempo más, partí hacia el este a contribuir con los de mi raza a la protección de Eriador. En breve tiempo logré llegar donde el capitán Aragorn, y pronto estuve luchando por la seguridad del que, yo estaba seguro, volvería a ser un poderoso reino. Transcurrieron los años y estalló la Guerra del Anillo, en la que tuve un papel, para muchos insignificante, pero a mi obviamente me quedó grabado en la memoria.
Hoy tengo el orgullo de ser uno de los capitanes de la Guardia del Rey Elessar en Annúminas, y tengo el agrado de estar aquí, bebiendo la mejor cerveza de la Tierra Media, mientras les cuento esta historia...
Habilidades:
Manejo cualquier arma con relativa facilidad, pero mi mayor habilidad se demuestra con la espada. Puedo decir, aunque suene a alardeo, que soy un gran jinete, y no me separo nunca de mi amado caballo Baran. Tengo un vasto conocimiento de la historia de la Tierra Media, y me deleito en escuchar historias, aunque muchas cosas aún se me mantengan ocultas. Tengo, si así lo deseo, la lengua aún mas afilada que mi espada...
Armas:
Llevo siempre conmigo mi querida espada Belekir, hecha por los mejores artífices de los Gwaith-I-Mírdain en Ost-In-Edhil. Llegó a mis manos como un regalo de Finlaurë, quien habia sido el original destino del obsequio. También llevo un cuchillo de caza, recuerdo de mis días como Montaraz, que me fue otorgado en Imladris antes de que estallara la Guerra del Anillo.Finalmente de vez en cuando ando con mi arco, otro regalo, pero en este caso por un amigo de los Eldar de Lindon llamado Celebel.
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